Entre estas «cuestiones básicas» que fallan en el control del interventor sobre la gestión del equipo de gobierno de Lorenzo Agustí, destaca el Síndic que no se da cuenta al pleno de los informes que se deberían emitir sobre gastos corrientes, ni tampoco sobre la fiscalización posterior de los derechos. También subraya que cuando la intervención fiscaliza algún gasto no contempla si hay crédito para hacer frente a las obligaciones pendientes ni la existencia de responsabilidades.
El estudio también analiza diferentes informes específicos como el de los presupuestos municipales de 2012 en el que „advierte„, el interventor «no se pronuncia sobre el cumplimiento de los plazos en los distintos trámites». No le consta al Síndic que se compruebe la suficiencia de gastos estimados, y tampoco que se haya hecho un informe sobre el cumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria sobre las modificaciones del presupuesto de 2011 ni sobre la liquidación del de 2010.Continua leyendo.>>>>
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